LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ❤🙏🏻

18 DE NOVIEMBRE
Mc 13, 24-32

El evangelio de hoy nos describe el fin del mundo.

Dice Jesús que habrá angustia, que el sol se oscurecerá, que la luna no dará resplandor y que los astros se tambalearán.

También nos dice que ésos serán los signos de su segunda venida y que nadie conoce cuándo sucederá todo esto, sólo el Padre.

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Al final del año litúrgico la Iglesia siempre nos recuerda y nos propone para nuestra meditación el hecho del fin del mundo y de la segunda venida de Cristo.

Tenemos que pensar que, aunque Cristo vendrá para juzgar, será un encuentro de Amor,  porque todo encuentro con Él es un encuentro de amor.

Habrá unos signos que anunciarán su venida, los signos antes descritos: el sol se oscurecerá, la luna no resplandecerá, los astros se tambalearán...

También habrá unos signos para reconocer a Jesús. ¿Cómo reconoceremos a Jesús en su segunda venida? Por los signos de sus Llagas, que han quedado impresas en Él, por ellas lo reconoceremos.

Si hemos contemplado sus Llagas en esta vida, las reconoceremos en seguida.

Si las hemos contemplado en el hermano, en seguida reconoceremos las Llagas de Jesús.

Tenemos que vivir esta vida con normalidad pero desapegados de todo, pues este mundo es perecedero y todo terminará.

Como dice Jesús "El cielo y la tierra pasarán pero mis palabras no pasarán".

Todo terminará, se acabará, pasará. Todo es limitado. Las personas fallamos. Todo termina cansando y todo acaba mudándose. Sólo Dios no falla y es permanente. Sólo Él llena y sacia el corazón para siempre.

Esto es lo que tenemos que pensar y vivir cada día, entregándonos y abandonándonos al Amor de Dios

De esta forma tenemos que vivir y preparar nuestro encuentro con Jesús, confiando en Él y contemplando sus Llagas, viviendo todas las cosas con normalidad (la amistad, la familia, el trabajo, el ocio...) pero sabiendo que todo pasa y que sólo Él llena totalmente.

PON A LA ESCUCHA EL CORAZÓN ❤🙏🏻

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.