sábado, 31 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

1 DE ABRIL
DOMINGO DE RESURRECCIÓN
Jn 20, 1-9



Hoy celebramos la fiesta más importante de toda la Iglesia: la Resurrección de Cristo.

Ésta es la fiesta más importante, que merece ser celebrada mil veces, porque, como dice el Apóstol, "Si Cristo no ha resucitado, vana es nuestra fe".

El evangelio de Juan nos cuenta que María Magdalena llegó al sepulcro el domingo muy temprano, vio la losa quitada, creyó que alguien había robado el cuerpo del Señor y fue corriendo a decírselo a Pedro y a Juan.

Entonces Pedro y Juan fueron corriendo al sepulcro, llegaron y vieron los lienzos, que casi seguramente eran una sábana, tendida, y el sudario que le había cubierto la cara al Señor enrollado aparte.

Juan siempre habla en tercera persona de sí mismo. Y dice, refiriéndose a sí mismo, que, al ver la sábana tendida y el sudario enrollado aparte, "El discípulo vio y creyó".

Vio y creyó porque no tenía ningún sentido que alguien se llevara el cuerpo y dejara allí la sábana que lo envolvía tendida, y el sudario que le cubría la cara enrollado y aparte.

Lo normal sería llevarse el cuerpo junto con la sábana que lo envolvía.

No tenía sentido entretenerse a quitar la sábana del cuerpo y dejarla allí.

Ni dejar el sudario enrollado aparte y entretenerse a doblarlo. Para qué?

Esta labor de detectives es importante hacerla con esta escena porque los detalles son muy importantes para entender el "Vio y creyó" de Juan.

Es verdad que su "vio y creyó" nace del amor y es una gracia pero también es cierto que hay unos indicios que él advierte en cuanto entra en contacto visual con la escena.

Nosotros también tenemos que hacer nuestro personal "Vio y creyó". O, mejor dicho, nuestro personal "Veo y creo".

Primero tenemos que hacer el camino al sepulcro que hizo María Magdalena al amanecer del domingo, es decir, tenemos que buscar al Señor.

Podemos buscarlo en la comunidad eclesial y esperar juntos al Resucitado.

Podemos imaginar en un rato de oración la llegada de Pedro y Juan al sepulcro... ¿Qué sentirían al ver que el Señor había resucitado?

Podemos pedir al Espíritu que aumente nuestra fe en la presencia de Jesús Resucitado.

También podemos ir al Sagrario y decirle a Jesús "Gracias por estar aquí VIVO y realmente presente".

Tenemos que hacer alguno o varios de estos caminos, que serían como el ir al sepulcro de María Magdalena al amanecer del tercer día.

Buscando a Jesús, lo encontraremos en la Iglesia, que es su Cuerpo místico.

Y también tendremos un encuentro personal con Él, pues, si lo buscamos con sincero corazón, nos dispondremos a dejarnos encontrar por Él.

Hace años en mi interior Cristo me tendió su mano y me ofreció tocar sus Llagas. Fue un encuentro con Jesús resucitado.

A todos nos llama Jesús a resucitar con Él, convoca a toda la Iglesia a resucitar con Él, y, convocando a la Iglesia, nos llama a cada uno a resucitar con Él a una vida nueva y a sanarnos en sus Llagas, teniendo un encuentro íntimo y personal con Él.

Para ello, déjate encontrar por Jesús resucitado, déjate amar y sanar, déjate abrazar y resucitar.

Y PON A LA ESCUCHA EL CORAZÓN ♥

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


viernes, 30 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

31 DE MARZO
SÁBADO SANTO



Hoy es sábado santo y, hasta que comiencen las vigilias pascuales, no hay ninguna acción litúrgica en la Iglesia.

Hoy es un día en el que impera el vacío por la Muerte del Señor y nos reunimos en torno a María para reposar en la oración todo lo vivido en la Pasión y para esperar con Ella que se nos haga presente Cristo Vivo y resucitado.

Como es un día en el que impera el vacío, se nos puede olvidar que ya estamos redimidos y que, en medio del dolor de la Pasión y de la soledad de nuestra Madre, ya podemos tener una oración de Acción de gracias por nuestra Redención y por nuestra filiación divina.

En cuanto muere el Hijo el Padre nos adopta como hijos y, como dice en la Carta a los hebreos, para heredar es necesario que muera el testador. Pues bien, el Hijo ya ha muerto, ya hemos heredado la Herencia eterna.

Nuestra Madre también nos ha adoptado como hijos, también somos hijos suyos ya, pues nos ha adoptado al mismo tiempo que ofrecía al Hijo.

Toda la Redención tiene su plenitud en la Resurrección pero ya podemos de alguna forma "tocarla" y "palparla".

Ayer le pregunté a Jesús qué sintió durante la Pasión y entendí que me decía que a más pecado cometían contra Él más Amor y Misericordia sentía por todos los pecadores, más si cabe por los que lo estaban acusando, condenando y crucificando.

Esa misma actitud de perdón nace hoy del Corazón de María mientras espera la Resurrección de su Hijo.

Hoy es por tanto un día para vivir el perdón y la Misericordia junto a María, para pedir perdón por nuestros pecados, para esperar la Resurrección junto a Ella.

Hoy en la oración podemos alimentar la esperanza en silencio, pasemos el día junto a María como hacen las familias cuando fallece un ser querido, unidos y pegados a la Madre, con la serenidad que da la esperanza en la Resurrección y con la gratitud de sabernos ya hijos de Dios e hijos de María.

Unidos a María, PONGAMOS A LA ESCUCHA EL CORAZÓN ♥🙏🏻

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


jueves, 29 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

30 DE MARZO
VIERNES SANTO
Jn 18, 1-19, 42



El viernes santo en los oficios se nos proclama la Pasión según San Juan.

La lectura de la Pasión nos deja sobrecogidos y debe llevarnos al Amor de Dios.

Es un día el viernes santo  para vivirlo con recogimiento y en oración.

Es un día para situarnos ante el Monumento con gratitud y con esa expresión de amor silenciosa que nace del alma cuando no se tienen palabras ante tanto Amor.

No oremos con un silencio vacío sino con el silencio enamorado de quien se siente sobrepasado por el Amor de Dios.

Creo que sobre todo el viernes santo tenemos que meditar en el Misterio de la cruz, sabiendo que es un misterio de Amor y sabiendo de entrada que no conseguiremos entender nada.

Normalmente todo lo relacionado con la cruz nos parece duro y profundo, nos sobrepasa tanto Amor.

Pero es cuando llegan las épocas de oscuridad, de prueba o de desolación cuando realmente vivimos la cruz y tenemos la oportunidad de unirnos a Jesús.

La teoría es muy bonita pero la práctica cuesta y no es fácil vivir la prueba.

Hay que dar un paso adelante y abandonarse.

Hace días le dije al Señor en la oración "Si Tú me quieres como Tú, calumniada, bendito sea Dios".

Entonces sentí que la Trinidad estaba teniendo conmigo la Misericordia de vivir la cruz.

Y se me concedió la gracia de sentir la cruz como un regalo, como una oportunidad de estar más pegada y más unida a Jesús.

El viernes santo es un día para pasarlo en oración y para entregar al Señor nuestras pobrezas y nuestras cruces, pues ¿qué otra cosa podemos entregar nosotros, pobres criaturas?

También es un día para abandonarnos al Señor y decirle desde el silencio del corazón que haga lo que quiera con nuestras vidas.

Hoy ante el Monumento PON A LA ESCUCHA EL CORAZÓN ♥🙏🏻

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


miércoles, 28 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

29 DE MARZO
JUEVES SANTO
Jn 13, 1-15



El evangelio del Jueves santo narra el lavatorio de los pies a los Apóstoles por parte de Jesús en la Última Cena.

Hay unas frases bellísimas al principio del evangelio de este día: "Sabiendo que había llegado la hora de pasar de este mundo al Padre, habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el extremo".

Creo que sólo la lectura de estas palabras debería llevarnos a orar en silencio un rato, dejando que las palabras cayeran en nuestra alma despacio, igual que cae el rocío de la mañana.

Pidamos al Espíritu que nos disponga al Amor de Dios, a ese Amor llevado al extremo. Para ello seamos humildes, pues la humildad es la puerta por la que entra el Amor de Dios.

Siempre hemos visto el lavatorio de los pies por parte de Jesús como un testimonio de servicio y una humillación de Jesús ante sus Apóstoles. Y es cierto, indudablemente es así.

Hoy me viene verlo también como un Signo del Amor de Dios hacia nosotros, de la limpieza que Jesús hace de nuestra alma y de nuestras heridas y pecados, eliminándolos con la cruz redentora.

Es también un Signo de la humillación de Jesús en la cruz, que queda poco para que se realice.

Él se abaja y se inclina ante nosotros para limpiarnos: ése es el misterio de la cruz, del cual es un Signo el lavatorio de los pies.

Él lava los pies pero, más profundamente, y en un gesto de Amor llevado al extremo, lava nuestros pecados si nos dejamos.

Sólo se nos pide una condición: por supuesto que rechacemos el pecado y, unido a esto, que nos dejemos amar por Él.

Él nos lava nuestros pecados inclinándose ante nosotros, tomando la condición de esclavo, porque lavar los pies era oficio de esclavos.

El lavatorio de los pies se convierte así en un Signo del Sacrificio de la cruz, en un Signo de la Expresión del Amor infinito del Corazón de Jesús que ansía entregarse y que está reventando de Amor y no puede más y ya en la Última Cena se abaja y se inclina a amar.

En ese Signo de Amor muestra el dolor por los pecadores, que somos todos, pero sobre todo muestra su dolor por los que no se arrepienten ante el Amor de Dios. Por eso nombra con pena a Judas: "No todos estáis limpios".

Por último, a partir del Signo de la Redención por Amor que es el lavatorio de los pies, se nos pide que aprendamos el precepto del amor: "También vosotros debéis lavaros los pies unos a otros".

Es decir, también vosotros debéis entregaros por amor como Yo, también debéis lavaros las heridas unos a otros, también debéis serviros unos a otros.

Es una invitación a vivir el sacerdocio común y el sacerdocio ministerial, cada uno desde su vocación.

Contemplemos el lavatorio de los pies y veamos un Signo del Amor de Dios, del Sacrificio redentor de Cristo, de lo que debe ser la comunión eclesial, de la caridad fraterna y del principio de toda vida espiritual: la humildad y dejarnos amar por Dios.

PON A LA ESCUCHA EL CORAZÓN ♥🙏🏻

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


martes, 27 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

28 DE MARZO
MIÉRCOLES SANTO
Mt 26, 14-25



El evangelio de hoy se centra en la traición de Judas.

Se presentó Judas a los sumos sacerdotes y les ofreció entregarles a Jesús. Acordaron que el precio serían 30 monedas de plata.

Después el evangelio se sitúa en un escenario completamente distinto: la cena de Pascua, la Última Cena de Jesús con los apóstoles.

Allí Jesús descubre al traidor.

Les dice a todos que uno de ellos lo va a entregar, Judas le pregunta al Señor que si es él y Jesús le contesta "Tú  lo has dicho".

La traición de Judas es la puerta que abre el demonio y que hace posible todo lo que vendrá después: el prendimiento, el juicio, la flagelación y crucifixión.

En estos días estoy experimentando en mi vida circunstancias parecidas a las que vivió Jesús en su Pasión.

El Señor me está haciendo esa misericordia para que sepa qué sintió exactamente Él ante las calumnias y el odio de los fariseos.

Así que esta Semana Santa cuando vaya a los oficios y al Monumento realmente podre decir "Si es posible aparta de mí este Cáliz pero que no se haga mi voluntad sino la tuya".

Y pasaré el Triduo pascual en el árbol de la cruz, que es el lecho del desposorio.

María me entrega al Padre junto con su Hijo.

Así sea.

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

27 DE  MARZO
MARTES SANTO
Jn 13, 21-31a.36-38



El evangelio de hoy nos sitúa en la Última Cena, la cena de la Pascua judía.

Estando aquí, Jesús se abre completamente a sus Apóstoles y les cuenta intimidades de su Corazón.

Jesús sabe que va a morir, por eso dice "Donde yo voy no podéis ir vosotros".

También sabe que Judas lo va a traicionar. Y se lo dice abiertamente: "Lo que vas a hacer hazlo pronto".

Me pregunto qué tiene que tener alguien en el corazón para traicionar a Jesús por dinero.

¡Cuánto debió de sufrir Jesús sabiendo que lo iba a traicionar uno de los suyos por el asqueroso dinero!

Y sabiendo también que Pedro iba a negar conocerlo.

Te dejaron solo, Señor. Todos los tuyos menos Juan.

Hoy en la oración apoyémonos en el pecho del Señor como Juan, oigamos los latidos de su Corazón y digámosle cuánto lo amamos.

PONTE A LA ESCUCHA EL CORAZÓN DE JESÚS ♥🙏🏻

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


domingo, 25 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

26 DE MARZO
LUNES SANTO
Jn 12, 1-11



Jesús fue a Betania a casa de sus amigos Lázaro, Marta y María y allí María tomó una libra de perfume de nardo, muy caro, ungió con él los pies de Jesús y después se los enjugó con su cabellera.

Mientras María tenía este derroche de amor, Judas se quejaba de que ese dinero no se hubiera guardado para los pobres. Pero no lo decía porque le importasen los pobres sino porque él tenía la bolsa y ese dinero lo habría guardado para él.

Jesús dijo "A los pobres siempre los tenéis con vosotros pero a mí no siempre me tenéis".

Este evangelio me habla de ser generosos con Jesús y de darle lo mejor.

Lo mejor de nuestro tiempo, de nuestra vida, de nuestros afectos, de nuestros propósitos y de nuestros planes.

Contrastan mucho en este evangelio María y Judas. Ella no escatima en darle al Señor lo mejor, mientras que él se queja porque lo que ha hecho María le parece un derroche.

Hoy podemos reflexionar sobre qué le damos al Señor, si le damos lo mejor o si le escatimamos nuestro tiempo, nuestra vida, nuestros planes.

Pensemos si tenemos en el corazón a Jesús y si Él es lo más importante.

Si le damos lo mejor de nuestra vida y de nuestros afectos y si tenemos detalles con Él que incluyen incluso nuestro arreglo personal cuando vamos a estar con Él.

Jesús valorará y guardará en su Corazón todo lo que hagamos por Él.

Pensemos qué detalles de amor tenemos con Jesús.

Ahora que vamos a revivir el Misterio Pascual démosle al Señor lo mejor.

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


sábado, 24 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

25 DE MARZO
DOMINGO DE RAMOS
Mc 14, 1-15, 47



El evangelio del Domingo de Ramos narra la Pasión del Señor y lo que me sugiere el Espíritu es fijarme en la cantidad de pecados y de actitudes pecaminosas que se cometieron frente al Amor de Dios expresado en Cristo.

Son cosas ya sabidas por todos pero hoy se me revela el evangelio como la narración de una sucesión de pecados cometidos frente al Amor de Dios.

Realmente, si observamos, vemos que nadie hizo nada bueno:

La entrega del Maestro por parte de Judas.

La cobardía de los Apóstoles, que dejan solo al Maestro o incluso niegan conocerlo.

El pecado más grave, que no tiene nombre: la envidia y el odio de los fariseos, que deciden dar muerte a Jesús.

La complicidad de Pilato, que condena a un inocente sabiendo que es inocente.

La crueldad de los soldados, que se mofan de Jesús para pasar el rato y que lo tratan como estaban acostumbrados a tratar a un reo.

La crueldad de todos los que pasan frente a Jesús crucificado y se burlan de Él con ironía.

Señor, ante este cúmulo de pecados, llama mi atención poderosamente tu silencio.

Pilato te pregunta "¿Eres tú el Rey de los judíos?" y respondes "Tú lo has dicho" y a continuación guardaste silencio y no dijiste nada más.

"No contestó más" dice el evangelio.

Hoy seguimos pecando y Jesús sigue guardando silencio.

Tenemos que convertirnos y PONER A LA ESCUCHA EL CORAZÓN y en silencio pedir perdón y no intentar comprender nada porque el Amor no se comprende sino que se vive, y más el Amor de Dios que supera todo lo imaginable.

Tenemos que pedir al Espíritu Santo que nos mueva al Amor y a darnos cuenta del Amor de Dios.

Estos días he puesto a mis alumnos una película muy bonita: "Adiós muchachos". Se trata de hechos reales sucedidos en la Francia ocupada por los nazis en la 2a Guerra mundial.

Unos padres carmelitas esconden a unos niños judíos en un internado de niños católicos. Una persona los delata y son apresados los niños y el superior de la casa, los cuales morirán en campos de concentración.

Les pregunté a mis alumnos en qué se parecía la película a la Pasión de Cristo y coincidimos en que uno - el carmelita apresado con los niños, pues era el máximo responsable de la casa - había dado la vida por los niños judíos.

Éste tiene que ser el punto de partida de nuestra Semana santa: que Jesús ha dado la vida por todos.

En esta Semana Santa pidamos perdón por nuestros pecados y guardemos silencio.

Pero no un silencio vacío sino un silencio orante y amante.

PON A LA ESCUCHA EL CORAZÓN ♥🙏🏻

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


viernes, 23 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

24 DE MARZO
Jn 11, 45-54



En el evangelio de hoy los fariseos deciden dar muerte a Jesús.

Concretamente el sumo sacerdote dijo "Conviene que uno muera por todo el pueblo".

Lo que él no sabía es que, con esas palabras, en realidad estaba diciendo la verdad, que convenía que uno muriera por el pueblo, aunque lógicamente él hablaba desde un punto de vista y con una intención totalmente torcidas.

Hoy también mucha gente "mata" a Jesús, deciden darle muerte, lo eliminan de sus vidas, lo expulsan de sus almas y de sus familias, incluso de la decoración de sus casas.

Él murió por nosotros porque convenía que uno muriera por todos. Insisto, en esto tenía razón el sumo sacerdote, aunque él hablaba en un sentido completamente distinto y torcido.

Nos estamos preparando para vivir los días cruciales de nuestra fe, el Misterio Pascual.

Pensemos en Jesús con amor y recemos por los que siguen hoy en día "matando" a Jesús, eliminándolo, como hicieron los fariseos.

Nosotros situémonos en el sentido piadoso y recto de las palabras "Conviene que uno muera por todos", no en el sentido pecaminoso y egoísta de esas palabras.

Contemplemos a Jesús con amor.

PON A LA ESCUCHA EL CORAZÓN ♥

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


jueves, 22 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

23 DE MARZO
Jn 10, 31-42



Nuevamente los judíos intentan apedrear a Jesús y Él les dice "He hecho muchas obras buenas, ¿por cuál de ellas me apedreáis?".

Ellos contestaron "No te apedreamos por una obra buena sino por una blasfemia, porque Tú, siendo un hombre, te haces Dios".

Jesús les dijo "Aunque no me creáis a mí, creed a las obras".

Esto es muy bonito porque, incluso cuando está en peligro de muerte, Jesús sigue cumpliendo la voluntad del Padre, que es mostrar a los hombres el Amor del Padre.

No le importa que no crean en Él, pero sigue insistiendo en que Él sólo hace lo que el Padre le ha encargado.

Su intención es tan recta que sólo busca que crean en el Padre. Por eso dice "Aunque no me creáis a mí, creed a las obras, para que comprendáis y sepáis que el Padre está en mí y yo en el Padre".

Esto es el colmo de la humildad y de la obediencia, pues el Hijo de Dios no se busca a Sí mismo e incluso pide que no crean en Él pero sí en el Padre.

Hoy el Espíritu nos pide que examinemos cómo es de recta nuestra intención, si sólo buscamos que Dios sea amado o si nos buscamos a nosotros con lo que hacemos.

PON A LA ESCUCHA EL CORAZÓN ♥

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


miércoles, 21 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

22 DE MARZO
Jn 8, 51-59



En el evangelio de hoy los judíos le dicen a Jesús que está endemoniado porque decía "Quien guarde mi palabra no conocerá la muerte".

Las discusiones entre Jesús y los judíos se han ido haciendo cada vez más fuertes, hoy los judíos llegan incluso a coger piedras para tirárselas a Jesús, es decir, para lapidarlo.

Todo porque Jesús les dice "El que me glorifica es mi Padre, de quien vosotros decís "Es nuestro Dios", aunque no lo conocéis".

Jesús les abre su corazón y les habla con sinceridad, les dice la verdad: que es el Hijo de Dios.

Pero ellos están ciegos y no lo ven.

No soportan que Jesús les hable como Dios ni que se haga igual al Padre.

Pero sobre todo no soportan que diga "Antes de que naciera Abraham yo soy", atribuyéndose así la existencia eterna.

Me da pena que sus corazones cerrados no vieran en Jesús más que a un mentiroso.

¡Qué pena que al que es la Verdad con mayúsculas lo consideraran mentiroso!

Se dejaban llevar por la soberbia y sacaban sus propias conclusiones, no soportaban equivocarse ni que nadie les diera lecciones.

La soberbia les hacía obcecarse y discutir con violencia.

Estaban tan seguros de sí mismos que tenían delante al Hijo de Dios y no lo veían.

Hoy deseemos nosotros ser humildes para ver las maravillas del Evangelio: a Dios hecho hombre, al Verbo encarnado, deseando entregarse por nuestro Amor.

Para ver a Dios es necesaria la humildad, hacernos pequeños y dejar que Él nos lleve en la palma de su mano.

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


martes, 20 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

21 DE MARZO
Jn 8, 31-42



Hoy Jesús nos habla de la filiación divina, de la maravilla de ser hijos de Dios.

Dice Jesús a los judíos: "Todo el que comete pecado es esclavo. El esclavo no se queda en casa para siempre, el hijo se queda para siempre".

Jesús nos libera del pecado, pero esa liberación no se queda "sólo" en liberación, a continuación se convierte en filiación divina.

Dejamos de ser eslavos y nos convertimos en hijos, igual que si estuviéramos presos y alguien pagara un rescate por nosotros y a continuación nos adoptara.

Me viene a la memoria la película Ben-Hur. El protagonista es liberado de la esclavitud por un general romano y a continuación lo adopta como hijo.

Jesús también dice a los judíos: "Si el Hijo os hace libres seréis realmente libres".

Es el Hijo de Dios el que nos libera del pecado, por eso nuestra liberación es efectiva y total.

El Hijo cumple el encargo del Padre, nos libera y nos presenta al Padre como hermanos.

Tanto el Padre como el Hijo tienen una unidad total de deseos y un Único Deseo de introducirnos en la vida trinitaria como hijos de Dios y hermanos de Jesús, reunidos y habitados por el Amor que es el Espíritu.

Jesús también dice a los judíos "Si Dios fuera vuestro Padre me amaríais, porque yo salí de Dios".

Pidamos al Espíritu que nos convierta y que disponga nuestro corazón al Amor de Dios, para vivir la filiación divina y la fraternidad con todos los hombres nuestros hermanos.

Vivir la filiación divina es identificarnos con el Hijo y ser como Él: es obedecer al Padre hasta la cruz, acogiendo a todos los hombres en el corazón.

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


lunes, 19 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

20 DE MARZO
Jn 8, 21.23b-30



Las discusiones entre Jesús y los fariseos cada vez son más tensas .

Ellos no creen en Jesús y Él les echa en cara su pecado.

Los fariseos le preguntan "¿Quién eres?" y Él responde que sólo comunica lo que ha aprendido del que lo ha enviado.

Ellos no entienden que les habla del Padre.

Entonces Jesús dice unas palabras muy profundas: "Cuando levantéis al Hijo del hombre sabréis que "Yo soy"".

Cuando Moisés vio en el desierto la zarza que ardía sin consumirse, Dios le habló y le dijo "Yo soy el que soy" o, con otras palabras, "Yo soy "Yo soy"" pues "Yo soy" es el nombre de Dios.

Por eso es muy significativo que Jesús diga "Cuando levantéis al Hijo del hombre sabréis que "Yo soy"".

Lo que está diciendo es que cuando lo levanten en la cruz será cuando muestre su divinidad porque la mostrará resucitando.

Se acerca la crucifixión y Jesús la tiene en mente y hace referencia a ella en las discusiones.

Me da pena lo solo que se sentiría Jesús en esos días, viendo que se dudaba de Él, teniendo que defenderse continuamente, sabiendo que lo iban a condenar y a matar.

Hoy se nos pide que pensemos en Jesús y en lo que sentiría en los días previos a su crucifixión, sabiendo que lo iban a crucificar.

Hoy se nos pide que nos pongamos junto a Él, lo contemplemos y lo miremos con amor.

PON A LA ESCUCHA EL CORAZÓN ♥

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


domingo, 18 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

19 DE MARZO
Mt 1, 16.18-21.24a


Hoy celebramos a José, el esposo de María.

Cuando María concibe a Jesús del Espíritu Santo, la situación entre Ella y José es de desposorio, que era el paso previo al matrimonio. En realidad era una situación matrimonial a todos los efectos, pero sin convivencia y sin que se hubiera celebrado la boda.

Dice el evangelio que José era justo. Esto quiere decir que era un hombre recto y bueno de corazón. Un hombre santo o camino de serlo.

No podía ser menos de quien debía cuidar en este mundo de Jesús y de María.

José se encontró con el embarazo de María y no sabía cómo actuar.

Decidió repudiarla en secreto y esta decisión debió de costarle mucho.

Dice el evangelio que se le apareció un ángel en sueños, el cual le dijo: "No temas acoger a María, tu mujer, porque la criatura que hay en ella viene del Espíritu Santo. Dará a luz un hijo y le pondrás por nombre Jesús porque salvará al pueblo de sus pecados".

Estas palabras del ángel fueron una bendición. Deshicieron sus dudas sobre cómo actuar, pusieron paz en su corazón y le revelaron Misterios que, salvo María, nadie más sabía.

Hoy celebramos a José y podemos reflexionar sobre su fidelidad en las dificultades, sobre su discreción y obediencia.

Santa Teresa de Jesús le tenía mucha devoción. Decía que san José nunca le había negado nada que le hubiera pedido en su fiesta.

Aprovechemos para pedir santidad, fidelidad y espíritu de oración y muchas otras cosas que podamos necesitar.

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


sábado, 17 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

18 DE  MARZO
Jn 12, 20-33



Jesús nos habla hoy de su crucifixión, que va a constituir la nueva Alianza entre Dios y el hombre.

Más concretamente la cruz va a ser, y es, la Expresión de la Alianza entre Dios y el hombre, y también la rúbrica.

Porque en el madero se va a derramar la Sangre del Cordero, que es la rúbrica de la Alianza.

En esta Nueva Alianza Dios da el primer paso y ofrece su Misericordia a cada hombre.

La expresión de la Misericordia toma forma en la entrega del Hijo.

Se trata de una Alianza con el hombre, en genérico, pero también es una alianza con cada hombre concreto.

La respuesta la da cada hombre en su vida, uno a uno a lo largo de los tiempos, y puede ser una respuesta presente en la crucifixión, en el Calvario, gracias a la Eucaristía.

La Sangre bendita de Jesús se derramó y cayó en tierra y bendijo así a este mundo dando frutos de salvación, haciendo fecundo el árbol de la cruz y sacando vida y gracia de la muerte y de la ignominia.

Por eso dice Jesús "Si el grano de trigo no cae en tierra y muere queda infecundo, pero si muere, da mucho fruto".

Porque Él es el grano de trigo que muriendo en la cruz nos ganó los frutos de la salvación y se transformó en el Pan de Vida que recibimos en la Eucaristía y que es Él mismo, que se nos entrega, si arrepentidos aceptamos su Sacrificio y su Alianza.

Jesús en el evangelio de hoy nos habla de su entrega en la cruz y se muestra dispuesto a entregarse y a obedecer al Padre.

Por eso dice "Por esto he venido, para esta hora". Para la hora de la cruz y de la entrega por los hombres, para obedecer y glorificar al Padre con su entrega.

En esta Alianza nos lo hemos encontrado todo hecho, la iniciativa y el ofrecimiento son de Dios, sólo tenemos que responder sí.

Es una Alianza muy ventajosa porque se nos pide dejarnos amar y sólo tenemos que responder sí, dar nuestro consentimiento.

La Alianza ya está firmada con la Sangre de Cristo, y su firma vale para las dos partes, porque Jesús es Hijo de Dios y Abogado nuestro.

Sólo tenemos que responder sí.

Respondamos sí con amor, en cada Eucaristía, en cada oración, hagamos una entrega de la vida, renovemos la entrega muchas veces, respondiendo a la Alianza de Amor.

PON A LA ESCUCHA EL CORAZÓN ♥

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


viernes, 16 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

17 DE  MARZO
Jn 7, 40-53



En el evangelio de hoy se ve cómo las discusiones sobre el mesianismo de Jesús arrecian de forma cada vez más fuerte.

Se aprecia mucha división, unos piensan que es el Mesías, otros que es un embaucador.

Incluso entre los fariseos hay división: muchos no creen en Él pero Nicodemo, que es fariseo, defiende a Jesús.

En medio de todo esto, los guardias del templo dicen a los fariseos: "Jamás ha hablado nadie como ese hombre".

Hoy me quedo con estas palabras sobre Jesús, que jamás ha hablado nadie como Él.

Nadie ha hablado como Él porque Él es la Palabra de Dios, el Verbo de Dios encarnado.

Nadie ha hablado como Él porque, como le dijo Pedro, "Sólo Tú tienes palabras de vida eterna".

Nadie ha hablado como Él porque sólo Él puede hablar al corazón y seducirlo.

Si quieres que Jesús te hable y te seduzca, haz oración y PON A LA ESCUCHA EL CORAZÓN ♥

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


jueves, 15 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

16 DE MARZO
Jn 7, 1-2.10.25-30



El evangelio de hoy nos cuenta que Jesús subió a Jerusalén a escondidas porque los judíos trataban de matarlo.

Estando allí, se puso a enseñar en el templo.

Los judíos piensan que el Mesías, cuando llegue, no se sabrá de dónde viene. Esto lo pensaban en tiempos de Jesús y lo siguen pensando actualmente, y algunos lo pensaban mientras Él estaba enseñando en el templo.

Entonces Él gritó "A mí me conocéis y conocéis de dónde vengo. Sin embargo, yo no vengo por mi cuenta sino que el Verdadero es el que me envía".

Con estas palabras intentaba decirles que Él es verdad que tenía una procedencia "humana", pues era hijo de José y de María y era de Nazaret, pero que la realidad es que era, y es, Dios hecho hombre, el Hijo de Dios enviado por el Padre.

Llenos de rabia, al oír sus palabras, intentaban agarrarlo pero dice el evangelio que no había llegado su hora.

Al leer este evangelio me doy cuenta de lo terrible que es que el Hijo de Dios, con su Corazón dulce y pacífico, sufriera la desconfianza de la gente.

No sólo la desconfianza sino que tenía que moverse a escondidas como un malhechor.

También me llama la atención su sentido de la libertad y su fidelidad a la voluntad del Padre: aunque no era comprendido, Él hacía lo que tenía que hacer y decía lo que tenía que decir.

Ven Espíritu divino, inflama mi corazón para que me entregue al Amor del Esposo más Fiel y más Libre.

PON A LA ESCUCHA EL CORAZÓN ♥🙏🏻

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


miércoles, 14 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

15 DE  MARZO
Jn 5, 31-47



Jesús nos dice que hemos de creer en Él y nos dice por qué:

En primer lugar por sus obras: "Las obras que el Padre me ha concedido llevar a cabo, esas obras que hago dan testimonio de mí, de que el Padre me ha enviado".

Jesús hacía obras de curación, de resucitación, de profecía y de expulsión de demonios. Estas obras daban y dan testimonio de que es el Hijo de Dios.

También hemos de creer en Jesús porque, tal y como Él dijo, "las Escrituras están dando testimonio de mí".

De este evangelio me sobrecoge la humildad de Jesús, que dice "Si yo doy testimonio de mí mismo, mi testimonio no es verdadero".

En lugar de ponerse Él como referente de Sí mismo, nos remite a las obras que el Padre le concede hacer y al cumplimiento de la Escritura en Él.

Nosotros, del mismo modo, tenemos que imitar la humildad del Hijo de Dios, que, siendo Dios, se presenta ante nosotros como el Enviado del Padre.

No da testimonio de Sí mismo por Él mismo sino que toda su misión y su existir tienen un motivo que es hacer la voluntad del Padre.

Del mismo modo, nosotros tenemos que ser humildes.

Somos pobres criaturas y todo nuestro ser y nuestro existir deben servir para dar testimonio de la Verdad.

Del mismo modo que Jesús sólo vivía para dar testimonio del Padre, nosotros tenemos que vivir para que Jesús se transparente en nuestra vida y siga dando testimonio del Padre en ti y en mí, desde ti y desde mí.

Para ello, déjate purificar para poder ser trasparencia de Dios y PON A LA ESCUCHA EL CORAZÓN ♥🙏🏻

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


martes, 13 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

14 DE MARZO
Jn 5, 19-30



En el Evangelio de hoy Jesús explica cómo es su unión con el Padre, hasta qué punto son UNO.

Nos dice que "El Hijo no puede hacer nada por su cuenta sino lo que viere hacer al Padre". De esta forma nos está diciendo que el Amor que el Hijo manifiesta es el Amor del Padre.

También nos dice Jesús que "Lo mismo que el Padre resucita a los muertos y les da vida, así también el Hijo da vida a los que quiere".

Este resucitar muertos podemos entenderlo como resucitar a los muertos del alma que son llamados - somos llamados - a la vida por Él desde la cruz.

Así nos lo dice cuando dice "Llega la hora, y ya está aquí, en que los muertos oirán la voz del Hijo de Dios".

También nos dice Jesús que el Padre ha confiado al Hijo el juicio. Esto es muy bonito porque quiere decir que la salvación nos ha llegado y nos llega por medio de Jesús.

Nos lo corrobora a continuación, cuando dice "Quien escucha mi palabra y cree al que me envió posee la vida eterna".

El Padre ha querido que la salvación nos llegue a través del Hijo. Esto es muy bonito y es una verdad que la Iglesia nos da hoy para meditar.

Por último, también nos dice Jesús que no busca su voluntad sino la voluntad del que lo envió.

Esto es muy característico de lo que es la santidad, que es la unión con Cristo buscando hacer, y haciendo, la voluntad de Dios.

En realidad se trata de la misma cosa: se busca hacer la voluntad de Dios por estar unido a Cristo y se está unido a Cristo buscando, y haciendo, la voluntad de Dios.

Aquí se ve claramente que la santidad es promovida por el Espíritu, porque es ingresar de lleno en la Dinámica de Amor entre el Padre y el Hijo, y este Amor es el Espíritu.

Hoy Jesús nos llama nuevamente a la conversión y a la santidad.

PON A LA ESCUCHA EL CORAZÓN ♥🙏🏻

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


lunes, 12 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

13 DE MARZO
Jn 5, 11.14-16



Jesús cura en sábado a un hombre que llevaba 38 años paralítico y los judíos no entienden ni aceptan ni que Jesús cure en sábado ni que el enfermo cargue con su camilla en sábado, después de ser curado.

Los judíos tienen el sábado como día sagrado y como día dedicado a Dios y son muy serios con el descanso del sábado.

Creo que cuando no cumplimos un precepto tenemos que ver por qué hemos obrado así.

Los católicos podemos no asistir a misa un domingo si estamos enfermos o si tenemos que cuidar de un enfermo y nadie más puede hacerlo.

Para nosotros es más importante el amor que el precepto dominical.

Esto lo hemos aprendido de Jesús. Para Él, el amor es más importante que cualquier otro precepto.

Esto tenemos que tenerlo claro: no tenemos que ser personas de preceptos vacíos.

Tenemos que cumplir preceptos pero con un sentido.

No sólo eso, en realidad para nosotros el único precepto es el amor.

El amor tiene que presidirlo todo y todos los preceptos hemos de vivirlos por amor y dejar de vivirlos por amor.

Como decía san Agustín "Ama y haz lo que quieras".

PON A LA ESCUCHA EL CORAZÓN ♥

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


domingo, 11 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

12 DE MARZO
Jn 4, 43-54



Hace unos días leímos en el evangelio que Jesús no fue bien recibido en Nazaret y que lo echaron de allí y casi lo despeñan.

También decía el evangelio que no hizo allí ningún milagro.

El evangelio de hoy nos dice que Jesús volvió de Judea a Galilea y que "los galileos lo recibieron bien".

Jesús valoraba y valora mucho que se tenga fe y no le gusta que se pidan signos, a no ser con humildad y por pura necesidad, porque es como desconfiar de Él.

Sin embargo, al volver de Judea a Galilea, cura al hijo de un funcionario real cuando éste le manifiesta humildemente su necesidad.

Jesús hacía milagros y signos cuando se le exponía humildemente la necesidad.

Pero sobre todo los hacía allí donde era bien recibido.

Es hermoso ver que Jesús, siendo Dios, se deja seducir por el cariño y, al revés, no se deja utilizar si no hay cariño.

Hoy podemos pensar cómo pedimos cosas al Señor y cómo nos dirigimos a Él y lo tratamos.

Si lo amamos y lo tratamos con verdadero amor, Él hará signos en nuestra vida. No sólo eso: toda nuestra vida será un Signo de Él.

PON A LA ESCUCHA EL CORAZÓN ♥

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


sábado, 10 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

11 DE MARZO
Jn 3, 14-21



"Dijo Jesús a Nicodemo: "Lo mismo que Moisés elevó la serpiente en el desierto, así tiene que ser elevado el Hijo del hombre, para que todo el que cree en Él tenga vida eterna"".

Estas palabras siempre me han parecido profundas y preciosas.

Hay una alusión al libro del Éxodo, cuando las serpientes mordían a los israelitas y Moisés rogó por ellos. Entonces Dios le dijo a Moisés que hiciera una serpiente de bronce y la pusiera en un asta y que todo el que la mirara quedaría curado de la picadura de la serpiente.

Jesús dice de Sí mismo que Él tiene que ser elevado para que todo el que crea en Él tenga vida eterna.

Es muy hermoso lo que se nos está diciendo.

Se nos está diciendo que igual que los israelitas eran mordidos por serpientes en el desierto y curados por mirar a la serpiente de bronce que estaba en lo alto, nosotros estamos mordidos por la serpiente del pecado y las heridas del pecado nos pueden causar la muerte.

Pero si, caminando por el desierto de la vida, a continuación de ser mordidos, o sea, de pecar, miramos con fe al Hijo de Dios elevado en lo alto de la cruz, viviremos.

Hoy se nos está diciendo y pidiendo que creamos en Jesucristo, el Hijo de Dios, y en su poder salvador y en que su Sacrificio nos libra de los pecados.

Hoy se nos está diciendo que recordemos que por Cristo nos ha llegado la salvación y que, si lo miramos, si volvemos a Él arrepentidos, si creemos en Él, si lo amamos, Él nos presenta al Padre desde la cruz en un Acto de Amor eterno y nos salva.

Vivamos el arrepentimiento por nuestros pecados y unámonos a ese Acto de Amor eterno en cada Eucaristía.

PON A LA ESCUCHA EL CORAZÓN ♥

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


viernes, 9 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

10 DE MARZO
Lc 18, 9-14



Subieron al Templo a orar un fariseo y un publicano.

El fariseo expuso ante Dios todos sus méritos: sus ayunos y limosnas.

El publicano se puso ante Dios y le suplicaba su perdón reconociéndose pecador.

Nosotros debemos ser humildes y, como la humildad es la verdad, reconocernos pecadores, que es lo que somos.

Nuestro único mérito es ser hijos de Dios y eso no es mérito nuestro sino regalo de Dios.

Es verdad que somos libres para amar o no amar a Dios y a los hermanos, y eso es meritorio, pero, como el amor no busca los méritos sino entregarse, no debemos sustentarnos en nuestros méritos, si es que los tenemos, sino buscar entregarnos.

Los méritos son un cimiento muy débil y engañoso, que no sostiene más que al orgullo.

El amor busca entregarse y nuestros méritos, si los tuviéramos, son una gotita frente al Amor de Dios que es infinito.

Son mucho mayores nuestros pecados, que pusieron a Cristo en la cruz.

No debemos fijarnos en nuestros méritos pues son mínimos. Ante Dios sólo somos pobres pecadores. Es ilusorio pensar que podemos presentarnos ante Dios con méritos. Es como si un niño le da a su padre una pelota de goma. El padre la coge y sonríe.

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


jueves, 8 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

9 DE  MARZO
Mc 12, 28b-34



Jesús dijo que "Amar al Señor con todo el corazón, con todo el entendimiento y con todo el ser y al prójimo como a una mismo vale más que todos los holocaustos y sacrificios".

Antiguamente existía la costumbre de sacrificar un animal para expiar las propias culpas.

También se suele entender que se pueden expiar las culpas haciendo un sacrificio o renuncia de algo.

Para nosotros el único Sacrificio que se puede ofrecer a Dios es el de su propio Hijo en la Eucaristía.

Éste es el único Sacrificio agradable a Dios porque Jesús es el Único digno de ofrecerse a Dios y de agradar a Dios.

Si hacemos renuncias o sacrificios no tienen sentido si no estamos unidos a Cristo y si no se los entregamos a Él en la Eucaristía para que los ofrezca al Padre.

Por eso en cada Eucaristía tenemos que entregarnos y renovar nuestra entrega, uniéndola a la de Cristo.

Como el Sacrificio de Cristo fue el Sacrificio del Amor redentor, que se entrega por Amor, unidos a Cristo el Espíritu ha de transformarnos en Amor si somos dóciles.

De este modo cambia toda la perspectiva de la espiritualidad.

Porque el acento no lo ponemos en mis sacrificios o renuncias sino en lo que el Espíritu obra en mí convirtiéndome en Amor y uniéndome a Cristo, y uniendo mi pobre vida al Sacrificio redentor de Jesús.

Entrégale tu vida a Jesús y deja que Él la transforme.

Es muy importante PONER A LA ESCUCHA EL CORAZÓN ♥, porque entregar la vida es entregar el corazón y no podemos hacer una entrega vacía sino acompañada de la escucha del Señor y del diálogo con Él.

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.


miércoles, 7 de marzo de 2018

LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ♥🙏🏻

8 DE MARZO
Lc 11, 14-23



El evangelio de hoy nos cuenta que Jesús expulsó un demonio y que a continuación algunos decían de Él que expulsaba demonios por arte del príncipe de los demonios.

También nos dice el evangelio que otros, para ponerlo a prueba, le pedían un signo.

Hay que tener desfachatez. Jesús expulsa un demonio y a continuación le piden un signo, cuando precisamente lo acaba de hacer.

El pobre Jesús expulsa un demonio y le dicen que lo hace por arte del príncipe de los demonios, que es como decirle que Él está de parte del demonio.

Él, que es el Hijo de Dios y el Santo de los santos, el Único Santo en realidad, y le dicen que expulsa demonios por arte del príncipe de los demonios.

Esto me lleva a pensar que Jesús debió de sufrir muchísimo y que su vida no fue fácil.

Es verdad que también dice el evangelio que la multitud estaba admirada pero también le decían estas otras cosas.

Tuvo que sufrir, sufrió de hecho, desprecios, incomprensiones, odios y envidias.

Creo que esto nos tiene que hacer pensar que Jesús ya tuvo un camino de cruz desde antes de la Pasión y que su Corazón sufriría con estos desprecios.

Todo esto le llevó a decir "El que no está conmigo está contra mí", porque su Corazón dulce demandaba y demanda adhesión y fidelidad.

Hoy podemos ponernos en lugar de Jesús, pensemos en los desprecios que algunos le hacían y en los odios que algunos le tenían, odios que lo llevarían a un juicio, a una condena a flagelación y a una condena a la peor pena de muerte que se pueda imaginar.

Hoy podemos pensar en los desprecios que nosotros hemos podido recibir y olvidarlos para consolar a Jesús.

PONTE A LA ESCUCHA DEL CORAZÓN DE JESÚS Y DESPUÉS ESCUCHA A TU PROPIO CORAZÓN ♥

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.