LA ESCUCHA DEL CORAZÓN 🙏🏻❤

10 DE AGOSTO
Jn 12, 24-26

Jesús nos dice que, para que el grano de trigo dé fruto, tiene que caer en tierra y morir.

También nos dice que quien ama su vida la perderá, pero que quien desprecia su vida en este mundo la conservará para la vida eterna.

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El evangelio de hoy nos habla de algo chocante: de despreciar la propia vida.

Sin embargo se trata de algo muy sabio porque sólo quien no está apegado a la propia vida tiene una vida plena.

Mientras que quien se ama a sí mismo desordenadamente crea un espacio para los egoísmos y los miedos que le impiden un desarrollo pleno.

Hay algo sabio en la naturaleza que nos dice que para dar fruto hay que morir. O bien morir en sentido real, como Jesús y los mártires, dando a luz a la Iglesia.

O bien morir en sentido figurado pero no menos real. Morir en el sentido de vivir humildemente una vida de entrega.

Hoy se nos pide que entreguemos nuestra vida a Jesús para que Él la convierta en una vida rica en frutos de amor.

PON A LA ESCUCHA EL CORAZÓN 🙏🏻❤

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.