*LA ESCUELA DEL ESPÍRITU SANTO*
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16 de enero de 2023
Las lecturas de hoy nos hablan de Jesucristo como sumo y eterno sacerdote.
En realidad Jesús es el único Sacerdote. Los ministros ordenados participan de su sacerdocio pero el único Sacerdote es Cristo.
Es sacerdote porque ofreció su vida y se ofreció a sí mismo por todos los hombres. Y, entregando su vida, ofreció un sacrificio agradable a Dios. Dicho sacrificio Dios lo acogió porque fue un sacrificio hecho con Amor eterno, totalmente digno de Dios Padre.
La Carta a los hebreos nos dice *"Tampoco Cristo se confirió a sí mismo la dignidad de sumo sacerdote, sino que la recibió de aquel que le dijo: «Tú eres mi Hijo: yo te he engendrado hoy»; o, como dice en otro pasaje: «Tú eres sacerdote para siempre según el rito de Melquisedec».*
Y el Salmo 109 dice *"El Señor lo ha jurado y no se arrepiente: «Tú eres sacerdote eterno, según el rito de Melquisedec».*
En el Evangelio se nos habla de que preguntaron a Jesús por qué no ayunaban sus discípulos. El respondió *"Llegarán días en que les arrebatarán al esposo, y entonces ayunarán".*
Lo que estaba queriendo decir Jesús con estas palabras es que Él es el esposo que se desposó con la humanidad y con cada alma en la cruz, precisamente donde se ofreció a sí mismo al Padre como Sacerdote. Nuestro ayuno tiene todo su sentido cuando vivimos la cruz o cuando nos sentimos abandonados por Dios (que no quiere decir esto que Dios nos haya abandonado, pero podemos sentirlo así).
María Dolores, virgen consagrada, archidiócesis de Madrid 💘🙏🏻
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