*LA ESCUELA DEL ESPÍRITU SANTO*

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1 de octubre de 2022

 *Las lecturas de hoy nos hablan de a quién se revela Dios, cómo y por qué.* 

 *Nos dicen que Dios se revela a los sencillos, que se revela por puro don y que a veces el sufrimiento es necesario para poder ver a Dios.* 

El Evangelio de San Lucas nos dice que Dios se revela a los sencillos. Dice que Jesús, *"lleno de la alegría del Espíritu Santo, exclamó: «Te doy gracias, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y a los entendidos, y las has revelado a la gente sencilla".* 

También nos dice el Evangelio que el hecho de que Dios se nos revele es un don inmerecido. Dice que Jesús dijo a sus discípulos: *«¡Dichosos los ojos que ven lo que vosotros veis! Porque os digo que muchos profetas y reyes desearon ver lo que veis vosotros, y no lo vieron; y oír lo que oís, y no lo oyeron.»* Lo que perseguía Jesús era que los discípulos estuvieran agradecidos a Dios, pues se les había revelado en Él.

El Libro de Job nos dice que Job reconoció que le había venido bien sufrir para encontrarse con Dios. Dijo Job: *"Te conocía sólo de oídas, ahora te han visto mis ojos; por eso, me retracto y me arrepiento, echándome polvo y ceniza.»* 

La misma idea de que el sufrimiento nos prepara para el encuentro con Dios aparece en el Salmo 118: *"Enséñame a gustar y a comprender, porque me fío de tus mandatos. Me estuvo bien el sufrir, así aprendí tus mandamientos. Reconozco, Señor, que tus mandamientos son justos, que con razón me hiciste sufrir."* 

Dios quiere revelarse a todos los hombres. Seamos sencillos y agradecidos y dejemos que Dios prepare nuestro encuentro con Él como Él lo considere.

María Dolores, virgen consagrada, archidiócesis de Madrid 💘🙏🏻