*LA ESCUELA DEL ESPÍRITU SANTO* 

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27 de julio de 2023

El Evangelio de hoy trata sobre *la dureza de corazón* .

Le preguntan a Jesús sus discípulos que por qué habla usando parábolas y responde que hay personas que da igual lo que se les diga porque no ven ni entienden porque tienen embotado el corazón.

Me ha sorprendido que hasta en cinco ocasiones aparecen hoy en el Evangelio expresiones relacionadas con _ver_ y _oír_ o con _no ver_ _ni oír_ , referidas a quienes le escuchan:

* Primero aparecen alusiones a los que ni ven ni entienden:

1️⃣ *"Miran sin ver y escuchan sin oír ni entender"*

2️⃣ *"Oiréis con los oídos sin entender; miraréis con los ojos sin ver"*

3️⃣ *"Son duros de oído, han cerrado los ojos; para no ver con los ojos, ni oír con los oídos"*

* A continuación aparecen alusiones a los que sí ven y sí entienden:

4️⃣ *"¡Dichosos vuestros ojos, porque ven, y vuestros oídos, porque oyen!"*

5️⃣ *"Muchos profetas y justos desearon ver lo que veis vosotros y no lo vieron, y oír lo que oís y no lo oyeron"*

Tanta insistencia en ver y oír o en no ver ni oír me ha hecho recordar que hace tiempo alguien me explicó que el Evangelio entra por los sentidos del oído y de la vista.

Sin embargo, la dureza del corazón puede embotar los sentidos y el único remedio es que Cristo nos cure el corazón. Así lo dice el Evangelio de hoy:

 *"Son duros de oído, han cerrado los ojos; para no ver con los ojos, ni oír con los oídos, ni entender con el corazón, ni convertirse para que yo los cure."*

Así pues, el único remedio para que cale en nosotros la Palabra es entregarle el corazón a Jesús para que lo cure. Si no, miraremos sin ver y oíremos sin entender.

Pidamos al Espíritu Santo que nos cure el corazón.

María Dolores, virgen consagrada, archidiócesis de Madrid ❤️🙏🏻