LA ESCUCHA DEL CORAZÓN ❤❤🙏🏻🙏🏻

16 DE SEPTIEMBRE
SÁBADO XXIII T.O.
Lc 6, 43-49

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"Cada árbol se conoce por su fruto"

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Los frutos es lo que producimos para que los demás se alimenten.

También es lo que hacemos para dar vida a los demás, a todo el que se acerca a nosotros.

Tenemos que preguntarnos si, cuando las personas se acercan a nosotros, se llevan algo para su vida, algo que les ayuda en su vida.

Hay muchas formas de ayudar, podemos ayudar con una sonrisa, haciendo un voluntariado, haciendo un favor, realizando una colaboración eclesial...

Cada uno tiene que ver qué le pide Dios...

Pero sobre todo ayudamos a los demás cuando los amamos, cuando nos comportamos con los demás como corresponde a la relación que tenemos, y somos buenos hijos, buenos padres, buenos esposos, buenos trabajadores, buenos amigos...

Damos buenos frutos cuando esparcimos el buen olor de Cristo allí donde estemos y algo de nosotros hace recordar a los demás que Dios los ama y que son dignos de ser amados.

Nuestros frutos tienen que ser de amor porque tienen que nacer de una semilla de Amor.

Esa semilla está sembrada en nosotros desde el Bautismo y el Espíritu la hace crecer en la oración y en los sacramentos.

Es una siembra que nos transforma y transforma nuestro corazón de un corazón sin amor en UN CORAZÓN A LA ESCUCHA ❤

María Dolores, virgen consagrada. Archidiócesis de Madrid.